domingo, 24 de abril de 2011

24 de abril de 2011.

ExcelenteMente11


“Una mentira cien veces repetida se convierte en verdad”. Sobre todo para el que la dice, que se refuerzan sus circuitos neuronales tanto que llega a utilizar esas mentiras como base de sus posteriores pensamientos y acciones. Y así acaba pensando y actuando como un loco que es incapaz de reconocer la realidad y solo es capaz de pensar entre los monstruos irreales de su mente. Por eso no nos podemos fiar ni podemos trabajar con mentirosos no solo en el momento de la mentira, sino tampoco en el largo plazo pues acaban vapuleados por una mente enferma.
Multitarea con la edad:
Desarrollar varias tareas al mismo tiempo, (atender a una conversación mientras se contestan unos e-mails y se está pendiente de que hierva el  té, anotar mentalmente donde dejamos el coche en el aparcamiento mientras recogemos nuestras cosas y lo cerramos) resulta cada vez más difícil  a medida que se van cumpliendo años y aunque todo el mundo lo achaca a problemas de la memoria de trabajo, estudios realizados  por investigadores de la “Universidad de California en San Francisco” y publicados en  la revista “Proceedings of the National Academy of Sciences.” Afirman que el problema es de la interacción de la atención con la memoria de trabajo «Nuestros trabajos sugieren que el impacto negativo de la multitarea en la memoria a corto plazo no es necesariamente un problema de memoria en sí, sino el resultado de una interacción entre la atención y la memoria», explica el autor principal del estudio, Adam Gazzaley. Por lo tanto de  los patrones de conectividad en dos áreas del cerebro de los participantes, la corteza visual y la corteza prefrontal.
Neuronas en su salsa:
 Las neuronas comparten los mecanismos de las demás células para mantenerse vivas y  reproducirse. Si no queremos que se mueran, atrofien o funcionen normalmente debemos cuidarlas igual que al resto del cuerpo: Con una nutrición sana que aporte todos los nutrientes necesarios pero nunca en exceso e intentando evitar los elementos perjudiciales. Oxigenandolas, con el torrente sanguíneo que podemos incrementar haciendo ejercicio físico. Y evitando venenos o elementos dañinos como la nicotina o el exceso de alcohol.
Para nutrir nuestras células tengamos en cuenta la máxima de Paracelso “El veneno está en la dosis”
 la cafeína es un buen estimulante cerebral pero en exceso o durante largos periodos tiene efectos perjudiciales.


Guillermo Galmés Cerezo